Una clara y concisa descripción de la práctica de Shamatha
¡Rindo homenaje al lama!
Me
postro ante los budas y sus herederos los Bodhisattvas,
Los
que, como un sol de Dharma,
Disipan
totalmente las tinieblas de la confusión entre los seres de los tres reinos,
Con
los brillantes rayos que irradian desde el sol de su sabiduría perfecta,
Diseminados
por los vientos como vehículo de su gran amor compasivo.
Este
es el linaje del León de los Shakyas, el Supremo sabio,
Las
tres colecciones escriturales, un camino perfecto de enseñanzas infalible,
Que
reunidas en una propuesta un practicante solo pueda seguir
Y
poner en práctica, en la tradición de los sabios y doctos maestros.
Ahora
en breve describiré la manera de tomar este noble camino,
Que
toma como su fundamento la disciplina moral que es perfectamente pura,
Para
que sobre la base de estar sumamente tranquilo, concentrado un punto,
Uno
pueda obtener la suprema sabiduría, completamente libre de cualquier defecto.
Cualquier
persona inteligente con un deseo sincero de buscar la liberación debe tomar
solo el verdadero enfoque que puede hacer que esto ocurra, la preciosa
enseñanza de los budas. La forma que se toman estas enseñanzas es como sigue.
Primero uno debe confiar en un excepcional y docto amigo espiritual como guía y
mediante el estudio de sus instrucciones, cortar con cualquier concepto erróneo
acerca de las tres secciones de las escrituras. Entonces uno debe aplicar los
tres entrenamientos en la realización superior de la propia mente y ponerlos en
práctica en la secuencia descrita por el gran maestro Vasubandhu:
Observar
la disciplina y habiendo oído y contemplado las enseñanzas, uno mismo se pone
intensamente a meditar.[1]
Según
esto, en primer lugar uno debe practicar moderación ética a través de la
disciplina moral pura de la renuncia, que es el fundamento de todas las
cualidades y luego a través del estudio y la reflexión sobre las etapas del
camino a practicarse, uno completamente entrena su mente y se embarca en el
camino real de la meditación en sí. Con respecto a la práctica principal del
camino, el glorioso Nagarjuna dijo:
Sin concentración meditativa, no puede
haber ninguna sabiduría
Y sin sabiduría, no puede haber ninguna
concentración meditativa,
Así, tomando estas dos juntas, el gran
océano del samsara
Se vuelve irrelevante, como una gota de
agua en la huella de la pezuña de un caballo.
Según
esto, mediante el enfoque que une meditación y sabiduría, o shamatha y
vipashyana, uno es capaz de encontrar la liberación del océano de la existencia
samsárica y progresar a lo largo del camino de la paz. La lógica detrás de esto
y la secuencia en que debe practicarse es explicada por Shantideva:
Sabiendo que se superan las aflicciones
de la mente
A través de la visión penetrante
impregnada con calma estable,
Usted primero debe buscar la paz de la
permanencia tranquila,
Según
esto, a menos que uno tenga la estabilidad de la mente reposando tranquila, uno
nunca ganará la sabiduría del vipashyana,
así que al principio uno debe cultivar shamatha.
Al hacerlo, primero uno desarrolla la 'mente enfocada en el reino del deseo' en
el cual el nivel burdo de los pensamientos y las distracciones relacionadas con
el nivel del reino deseo son totalmente pacificados. Entonces, uno logra poco a
poco las cuatro meditaciones dhyana correspondientes a los niveles del reino de
la forma y las cuatro absorciones del reino de no forma. Estas nueve etapas
correspondientes a los nueve niveles de los tres reinos son conocidas como
'meditaciones mundanas' o 'concentraciones pueriles', y proporcionan la base
para el camino supra mundano. Luego hay la absorción de cesación, que se
alcanza sólo a través del camino supra mundano y se agrega a esas ocho formas y
absorciones sin forma, nueve en total, conocidas colectivamente como 'las nueve
absorciones sucesivas', porque deben pasarse secuencialmente, una tras la otra.
Esta
es la principal práctica de concentración meditativa o samadhi. Además, también
hay los samadhis comunes, tales como las tres liberaciones, diez totalidades,
ocho esferas de percepción dominante, cinco super cogniciones demás, que se
desarrollan con una mente de la forma y etapas sin forma a través de la
actividad mental específica en los distintos niveles. Uno debe saber que todos
los samadhis del camino supra mundano en general y de los nobles bodhisattvas
en particular — la ilusión-como samadhi, guerrero-estando en samadhi,
vajra-como samadhi, etc.---, así como la retención mnemotécnica, la confianza y
todas las entradas infinitas a la liberación, no son nada más que otras
variaciones del samadhi en el cual están unidos shamatha y vipashyana.
Una
vez que se han entendido estos aspectos generales, llegamos a la actual
instrucción sobre cómo meditar. Dejando ocupaciones e interacción ordinarias
detrás, en un ambiente solitario, comienza por generar una mente de renuncia y
de bodichita. Luego visualiza frente a ti en el cielo a todos los budas y
bodhisattvas de las diez direcciones y una vez que hayas realizado las siete
ramas como un medio de purificación y reuniendo las acumulaciones, ruega
concentrado que puedas desarrollar el samadhi puro. Entonces adopta la postura
correcta, siéntate recto en tu asiento, en plena o media postura vajra, o como te
sea más cómodo, con las manos descansando en la postura de la ecuanimidad, con
una mirada suave y uniformemente equilibrada, etc. Entonces examina muy
cuidadosamente tu continuo mental: Si observas cualquier pensamiento o emoción fuerte
que impiden que la cabeza repose en quietud — sentimientos como deseo, ira, malicia,
orgullo o confusión — entonces aplica el antídoto adecuado, como meditar sobre la escasa atracción, el amor, la
compasión, analizando los elementos psicofísicos (dhatus), la originación interdependiente, la inhalación y
exhalación de la respiración y etc., con el fin de hacer más funcional tu
mente. Entonces, cuando la mente está preparada, concentrado en su objeto
particular, puedes comenzar la práctica de la meditación shamatha.
Las
tradiciones se basan en fuentes de las escrituras y las instrucciones
medulares, en innumerables métodos de meditación, pero aquí sigue las fuentes
clásicas y ante todo las nueve maneras de reposar la mente para lograr la mente
enfocada del reino del deseo.
Los Sutras Ornamento del Mahayana dicen:
Poniendo la atención en un objeto de
concentración,
Manténgase en eso y no se distraiga.
Reconociendo rápidamente la distracción
cuando ocurre,
Coloque la mente en su objeto, una vez
más.
Cada vez más, aquellos con mentes
inteligentes,
Deben reunir y centran su atención.
Entonces, para experimentar cualidades
reales,
La mente en samadhi debe ser controlada.
Viendo las desventajas de la
distracción,
Pacifique el desagrado por la
meditación.
La avaricia, el malestar mental y demás
De la misma manera son pacificados.
El practicante diligente establece la
mente
Aplicando algo de esfuerzo.
Finalmente, a través de familiaridad,
esto se da
Natural y espontáneamente, sin mayor
esfuerzo.
Según esto, coloca tu atención concentrada en un determinado
objeto de concentración y siga con atención puntual centrada en la imagen clara
que surge en la mente. Entonces sostén continuamente esta imagen, sin ser
distraído por ninguna otra cosa. Sin embargo, cuando se produce cualquier
distracción, burda o sutil, debes reconocerla inmediatamente con conciencia
vigilante y coloca nuevamente la atención sobre el objeto de concentración. No te
des por satisfecho con una leve quietud de la mente, tienes que eliminar
incluso la tendencia más sutil a la distracción y descansar en una atención
centrada. Si experimentas cansancio y falta de entusiasmo por el samadhi,
entonces reflexiona sobre las cualidades de los budas y bodisattvas en general
y, en particular, en las cualidades tales como la supercognición y las
habilidades milagrosas que surgen a través del poder del samadhi y genere
entusiasmo por la práctica. Si comienzas a tomar gusto por ocupaciones o
cualquier cosa que no sea conducente a la quietud de la mente, reflexiona sobre
las fallas del samsara en general y especialmente las fallas de perder tu
camino y permanecer en tu estado ordinario. Reconociendo los defectos de
distracción y de las ocupaciones, pacifica la excitación de la mente. Cuando
cualquier estado mental impide el samadhi --tal como la avaricia, el malestar
mental, la emoción, el arrepentimiento, la somnolencia o letargo, malicia, el
anhelo de objetos de deseo, la vacilación, etc.-- tranquilízalos aplicando un
antídoto adecuado. Ampliarás el período de quietud de esta manera, aunque
mientras todavía hay cierta preocupación acerca de la opacidad o agitación que
surgen en la mente y la necesidad de aplicar deliberadamente un antídoto, que
sigue siendo la octava etapa de reposar la mente. Cuando ya no es
necesario aplicar un antídoto fuera de la expectativa o preocupación con
respecto a algo a ser abandonado o de su remedio, y puedes permanecer
espontáneamente en un estado de quietud tanto como deseas, esta es la novena
etapa de descansar la mente, la mente enfocada del reino del deseo. Este es el
genuino shamatha, pero si aún no cuentas con la dicha de la flexibilidad física
y mental, no has alcanzado aún la real etapa preparatoria para las meditaciones
dhyana.
Una
vez que se alcanza la flexibilidad, hay un fundamento para el desarrollo de la
sabiduría del vipashyana. Esta es la etapa preparatoria que se conoce como la ‘fase
competente'. En este momento, hay siete procesos mentales a través de los
cuales se alcanza la parte principal de la meditación dhyana.
En
primer lugar, existe el proceso mental
de discernir precisamente las características, en el que uno entiende las
cualidades positivas y negativas de los tres reinos y sus causas respectivas,
las aflicciones mentales de los diferentes niveles de existencia, así como las
cualidades especiales de la meditación dhyana.
En
segundo lugar, existe el proceso mental
de convicción, que es la confianza que surge de esta meditación, en la cual
deben ser descartadas las falencias de los niveles inferiores, mientras que las
cualidades de los niveles superiores deben ser alcanzadas.
Entonces,
el proceso mental de completa separación
implica descartar el tipo más burdo de los pensamientos que debe abandonarse al
aplicar el antídoto para las aflicciones mentales de un plano inferior de
existencia.
Cuando
uno es liberado de estas aflicciones mentales de una etapa inferior, uno logra
la dicha y el bienestar físico de la flexibilidad física y mental, y esto se
conoce como el proceso mental de obtener
regocijo.
El proceso
mental del análisis
significa que mientras la mente esté atenida a un nivel particular, las
aflicciones mentales del nivel inferior no deben surgir, y así uno
deliberadamente se centra en un objeto determinado y examina cuidadosamente la
mente, abandonando cualquier aflicción que se desarrolle.
El proceso
mental de la culminación del compromiso es el camino libre de obstáculos
durante el cual el antídoto supera las aflicciones mentales sutiles del nivel
inferior que surgen en la mente.
El proceso
mental del resultado de la culminación del compromiso es el camino de
la liberación total, el momento en el que ya no hay ninguna necesidad de
aplicar un antídoto, las aflicciones mentales del nivel inferior han sido
totalmente erradicadas.
Así
es cómo la mente de la práctica principal dhyana es lograda.
El primer nivel de dhyana que se logra de
esta manera tiene cinco características: Concepción, discernimiento, dicha,
bienestar físico y samadhi.
El
segundo dhyana, que es más
tranquilo, tiene cuatro características: La perfecta claridad en la que
concepción y discernimiento han sido abandonados, dicha, bienestar físico y
samadhi.
El
tercer dhyana, que todavía es más
tranquilo, tiene cinco características: Ecuanimidad en la que se ha abandonado
el concepto de dicha, atención consciente, conciencia vigilante, bienestar
físico y samadhi.
El
cuarta dhyana, que se llama el
dhyana final porque todavía es aún más tranquilo, tiene cuatro características:
La sensación neutral en la que se ha abandonado la sensación de bienestar
físico, la conciencia plena, la formación mental de ecuanimidad y el samadhi.
Eso
es sólo una breve descripción de los cuatro dhyanas. No he mencionado aquí sus
características particulares en detalle, ni he entrado a las maneras de meditar
en las absorciones sin forma, por temor a que esto haría el texto excesivamente
largo y también porque esto parece ser poco necesario. Aquellos que estén
interesados pueden consultar los textos del Abhidharma o del Prajnaparamita.
Cualquier
sea el tipo de samadhi que uno está cultivando, los siguientes factores son
importantes a tener en cuenta. Hay cinco fallas relacionadas con la meditación:
Pereza, olvidar el objetivo del enfoque; opacidad y agitación; no aplicar el
antídoto por estar muy relajado; y, aplicar una y otra vez el antídoto porque
uno está demasiado firmemente enfocado y simplemente no contento del resto. Los
antídotos para estas son conocidos como las ocho aplicaciones. Confiando
realmente en las cualidades del samadhi, la aspiración de lograr estas
cualidades, la diligencia consistente y dedicada que inspiran a estas dos, la
flexibilidad gozosa que se desarrolla como un resultado, son los cuatro
antídotos a la pereza. La atención plena es el antídoto contra el olvido. La
conciencia alerta es el antídoto contra el aburrimiento y la agitación. El
antídoto a la insuficiente aplicación es aplicar el antídoto, trayendo a la
mente las razones para practicar shamatha y vipashyana, como medio de superar la
torpeza y la agitación, y la ecuanimidad es el antídoto para la
sobre-aplicación. Es a través de esto que la mente meditativa es alcanzada.
Una
vez que la mente de concentración meditativa se ha logrado de esta manera, si
uno analiza 'las cuatro puertas de entrada a la visión de la realidad' — los
agregados, los elementos psicofísicos, las fuentes sensoriales y la originación
interdependiente — mediante la lógica válida del último razonamiento, tales
como el análisis de ni uno ni lo otro o muchos y luego permanece enfocado en el
'no-hallazgo' de nada en absoluto, que se convierte en la unidad de shamatha y
vipashyana, que es el gran acercamiento conducente al camino de los nobles y al
completo desarraigo de la existencia samsárica. Además de esto, los distintos
métodos para la práctica de shamatha y vipashyana vinculados con las profundas
instrucciones medulares, si acercamiento gradual o directa 'derivación', deben
ser aprendido solamente a partir de las instrucciones orales.
La entrada al camino que conduce a la
paz de la liberación,
Es el samadhi en el cual shamatha y
vipashyana están unidos.
Esta clara y breve instrucción sobre
cómo se logra
Fue escrita y ofrecida desde una ermita
de práctica aislada,
Por el monje budista llamado Pema Vajra,
Para cumplir los deseos de la diligente
yoguini Wangmo.
¡A través de este mérito, pueda la
realización de los caminos y niveles incrementarse
Y el bienestar propio y ajeno
espontáneamente lograrse!
¡Qué todo sea virtuoso!
|
Traducido del tibetano al inglés por Adam / Versión al español: Miguel Norbu G.
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