jueves, 18 de diciembre de 2008

Los 4 Estados Infinitos o Las 4 Moradas Divinas

(Los Cuatro Inconmensurables)

 

Un discurso de Buda Shakyamuni.

Aquí, amigos, el Bhikkhu con una mente llena de amistoso amor-bondadoso llena primero una dirección, luego una segunda, luego una tercera, y entonces la cuarta, y también abajo y luego arriba, a través y por todo el derredor, en todas partes identificándose a sí mismo con todos los seres vivos, entonces envuelve el universo entero con una mente llena de  amistoso amor-bondadoso, con una mente amplia, desarrollada, sin límites, aclarada, exaltada, pura y brillante, completamente libre de odio y mala voluntad.

Mas aún, amigos, el Bhikkhu con una mente llena de compasiva comprensión llena primero el frente, luego el lado derecho, luego atrás, luego el izquierdo, luego abajo y arriba, a través y alrededor, a la lejanía y alcanzado a todos; cuidando y ocupándose de todos los seres vivos, entonces impregna el universo con una mente saturada de compasión empática, con una mente espaciosa, una mente refinada, purificada, pura y brillante, libre de ira y cualquier animadversión.

Todavía más, amigos, el Bhikkhu con una mente llena de alegría mutua y empática, satura el Norte, y luego el Este, y entonces el Sur y luego el Oeste, así como abajo y arriba, a través y alrededor, universalmente, infinitamente; protegiendo a todos los seres vivientes en su pensamiento, entonces impregna todas las galaxias con una mente llena de alegría altruista, mutua y genuina, con una mente abierta, vasta, ilimitada, clara, pura y brillante, libre de toda aversión y de toda amargura.

Finalmente, amigos, el  Bhikkhu con una mente llena de ecuanimidad bien balanceada, saturando primero el cuadrante del frente, luego el derecho, luego atrás y luego el cuadrante izquierdo, arriba y abajo, a través y por todos lados; por todas partes y de modo completo, se mantiene entonces llenado el universo que todo lo abarca, con su presencia de la sabiduría natural, con ecuanimidad, con una mente generosa, expansiva, sin medida, calma, con una mente igual a una montaña, cultivada, sin fin, pura y deslumbrante, sin hostilidad, y sin resentimiento

Traducida del Ingles por Nagkpa Thondup Dorje, para beneficio de su propia práctica.

Dedico el mérito de esta traducción a todos los seres sin excepción para que alcancen pronto y sin obstáculos, el estado de la Perfecta y Completa Iluminación.

Nota: Esta practica se puede hacer cada día al levantarse por la mañana, y/o varias veces durante el día.

http://www.freewebs.com/agregadosyproyecciones/vajrayana.htm

lunes, 15 de diciembre de 2008

S.S. Shenphen Dawa Rimpoche:

Purificación


Su Santidad Senphen Dawa Norbu Rinpoche, hijo de S.S. Dudjom Rinpoche y actual regente del linaje Dudjom Tersar, nació en Kongbo (Tíbet), en el año 1950. Fue reconocido por Su Santidad Karmapa como la reencarnación de Taksham Tulku y Tulku Yeshe, descubridor de numerosas enseñanzas ocultas. A lo largo de su infancia y juventud, recibió de su padre un adiestramiento completo en todos los aspectos del budismo Mahayana y Vajrayana. Además, fue educado en diferentes escuelas occidentales, razón por la cual no sólo se expresa en perfecto inglés sino que comprende perfectamente la mentalidad occidental.

Hoy en día las enseñanzas de Dzogchen están muy de moda. A la gente le gusta la práctica del Dzogchen, especialmente aquellas personas que tienen una buena base de entrenamiento, una mente abierta, y que hacen un uso del intelecto muy refinado. 

Lo cierto es que en la práctica del Dzogchen hay muchos maestros que pueden decir simplemente que nos sentemos, que no hay que visualizar nada, que no hay nada que hacer, simplemente nos dicen que nos sentemos, que abramos la boca, que miremos el cielo, y que la naturaleza de nuestra mente vendrá. Este tipo de Dzogchen no es Dzogchen en absoluto. Con este tipo de ejercicio de abrir la boca y mirar al cielo, solo estamos contemplando el refinamiento de nuestro intelecto, porque desde el punto de vista de la práctica no se puede conocer la naturaleza de la mente si no se pasa antes por un proceso de purificación. Con la purificación agotamos el flujo del karma. Esto es muy importante.


Agotando el flujo del karma, el intelecto podrá descansar. El descanso del intelecto depende totalmente de la purificación, de otra manera el intelecto continuara jugando entre la realización y el engaño. De esta manera sin la purificación no será posible realizar ningún estado de la mente, porque a través de las puertas del cuerpo, la palabra y la mente hemos acumulado cantidades infinitas de karma negativo. Si pudiésemos ver la infinidad de este karma negativo perderíamos la motivación en la práctica. En la gran perfección, si no pasamos por el proceso de purificación no podremos entrar dentro de la mente iluminada, que es el objetivo de la práctica.


Hay que realizar un gran esfuerzo y este esfuerzo es la purificación. No se puede hacer este trabajo de chiripa hay que curar mucho para llegar al estado de iluminación. Este proceso no ocurre por casualidad. Si el que te toque la lotería es difícil, es aun mas difícil que te toque la lotería del estado de la iluminación.


Si leéis sobre las vidas de los grandes santos y sabios del pasado, incluso si leéis la vida de los budas, desde el primero hasta el cuarto pasando por el tercero, veréis que siempre han intentado acumular virtud positiva. La acumulación de virtudes positivas es muy importante, porque el objetivo de la realización es agotar todo karma negativo para así poder agotar los fenómenos totalmente.


Todos los maestros de la gran perfección del linaje siempre han dado una importancia absoluta a la práctica relativa. Incluso Guru Rinpoché dijo: “Mi visión va mas allá del cielo, pero mis acciones son tan diminutas como un grano de cebada”. Un gran maestro le dijo a su hijo: “El problema no está en los fenómenos, el problema está en el apego”.


Extracto muy breve de unas enseñanzas orales sobre el Ngondro (preliminares) impartidas por Rinpoche en 1996 en Internacional Tersar Ling, Tarragona

http://www.revistadharma.com/bud3.htm

 

sábado, 13 de diciembre de 2008


MEDITACIÓN CON LA SÍLABA HUNG*

*Extractado del Libro “The Teachings of Mahamudra” Las Enseñanzas de Su Santidad del Drikung Kyabgon Chetsang Rinpoche.

Traducido por Grupo Editorial Rimé (2005). Chile

 

9. EJERCICIOS DE MEDITACIÓN E INSTRUCCIONES

a) En este ejercicio usamos la sílaba HUNG, visualizando todas las cosas en la forma de la sílaba HUNG mientras recitamos la sílaba. Lo que sea que surja, sea interno o externo, se vuelve HUNG. Todos los pensamientos se vuelven HUNG. Todas las cosas se vuelven HUNG; una pequeña piedra se vuelve un pequeño HUNG, un gran árbol se vuelve un gran HUNG, lo hacemos emitiendo el sonido por la boca sin cerrar los dientes. Siempre debemos dejar un espacio entre los dientes.

En esta práctica unimos tres cosas a la sílaba HUNG: El viento (energías internas dinámicas), conciencia, y apariencias. Haga esta práctica por aproximadamente diez minutos.

b) Recite la sílaba HUNG mientras hace la siguiente visualización. Visualice el universo entero, cercano y distante a la vez, todos los elementos en él, en la forma de la sílaba HUNG. Imagine los objetos grandes como grandes HUNGs, los pequeños, minúsculos como minúsculos HUNGs. Visualice todas estas sílabas viniendo desde cada rincón del universo y entrando al cuerpo a través de las puertas de los sentidos. Cuando entran al cuerpo, transforman todos los elementos internos de uno mismo en la sílaba HUNG. Nuevamente, sus tamaños dependen del elemento y del tamaño del elemento que ellos remplazan, hasta que el cuerpo completo esta lleno con nada más que la sílaba HUNG. Haga este ejercicio por aproximadamente diez minutos.

c) Aquí hay otra manera en la cual recitar la sílaba HUNG. Hay que decirla con mucha  fuerza, muy rápidamente y muy poderosamente. Mientras las recitamos, las sílabas HUNG salen desde nuestro centro, desde dentro de nosotros, irradiándose en todas las direcciones. Las sílabas se proyectan en todas direcciones como balas disparadas por una ametralladora, extremadamente rápidas, extremadamente potentes. Cada una es como una bala  que es tan fuerte y rápida que penetra a través de todo. Nada puede obstruirlas, ni árboles, ni rocas, ni siquiera montañas. Nada puede oponérseles. Las sílabas HUNG en todas sus formas y en todos sus tamaños dentro de nosotros, se irradian en todas las direcciones. Hay que visualizarlas saliendo  sin obstrucciones. Hay que practicar de esta forma por aproximadamente diez minutos.

f) Ahora concéntrese solamente  en relajar su cuerpo  desde el interior,  de modo que toda el área completa dentro del pecho este muy relajada y cómoda. El área alrededor del ombligo debe estar especialmente relajada y abierta. Hay que practicar esta meditación en silencio por aproximadamente diez minutos.

Nota del Traductor:

Estos Tres ejercicios pueden integrarse en uno solo. Agregando Refugio y Bodhicitta y Dedicación se convierten en una práctica completa


Refugio y Bodhicitta

1.- Primero Realice las 9 Respiraciones de Purificación (Puede repetirlas mas de una vez)

2.- Tome Refugio en las Tres Joyas con alguna de las formulas tradicionales. Puede simplemente usar al comienzo (Namo Guru Be, Namo Buda Ya, Namo Dharma Ya, Namo Sangha Ya)

3.- Luego Genere la actitud del Bodhisattva  recitando alguna de las formulas tradicionales (O puede abreviarla de este modo “Me propongo practicar para alcanzar rápidamente el completo despertar y conducir a todos los seres sin excepción al mismo estado”).

4.- Realice la práctica principal emitiendo un HUNG y visualizando el HUNG azul (oscuro o claro) en el centro del cuerpo en el canal central a la altura del corazón.

Comience a recitar el HUNG muchas veces en voz alta y rápidamente mientras del HUNG del corazón se irradian miles HUNG inundando el cuarto, la ciudad, el mundo, y el universo. Luego de un rato, reabsorba los HUNG mientras su cuerpo se llena de ellos y ellos finalmente se disuelven en el HUNG central, no quedando nada del cuerpo físico.

Luego resida algunos instantes en la clara visualización del HUNG y luego disuélvalo desde abajo hacia arriba descansando la mente en el estado natural, de pura presencia, de pura conciencia, sin nada que traer o alejar de la mente. Plenamente vigilante, lucido y despierto.

Luego realice 3 respiraciones (las 3 últimas del ciclo de las 9 respiraciones y repita el ejercicio).

Puede realizarlo varias veces si tiene tiempo.

5.- Finalmente, concluya la practica dedicando el merito de la misma a todos los seres, usando alguna formula tradicional o la plegaria para incrementar la Bodhicitta (en español o en tibetano es igual. Lo importante es clara atención y conciencia del sentido.

Lo mismo aplica para las otras formulas tradicionales a excepción de los Mantras que deben ser hechos en Sánscrito para preservar la vibración. (Puede usar lo siguiente: “Que el merito acumulado por hacer esta practica  me permita  alcanzar rápidamente el completo despertar y poder así conducir a todos los seres sin excepción al mismo estado”.

Sarva Shri Mangalam

Ngakpa Konchog Thondup Dorje

lunes, 8 de diciembre de 2008


Extractos del libro "Enlightened Courage"

de Dilgo Khyentse Rinpoche


Considera todos los fenómenos como un sueño.

Este precioso cuerpo humano, que aunque es un instrumento supremo para obtener la iluminación, es en sí mismo un fenómeno transitorio e impermanente.

Nadie sabe cuándo o cómo le llegará la muerte. En un instante se forman burbujas sobre la superficie del agua, y al instante siguiente desaparecen; las burbujas no permanecen. Sucede lo mismo con nuestro precioso cuerpo humano que hemos logrado encontrar. Nos tomamos todo el tiempo del mundo antes de comprometernos con la práctica espiritual, ¿pero quién sabe cuándo esta vida nuestra sencillamente dejará de existir? Y una vez que hemos perdido nuestro precioso cuerpo humano, nuestro "continuo mental", continúa su existencia, tomará un nuevo nacimiento tal vez entre los animales, o en alguno de los reinos infernales o de los dioses, donde el desarrollo espiritual es imposible.

En el momento actual, el universo externo --tierra, piedras, montañas, rocas y acantilados-- aparecen ante la percepción de nuestros sentidos como permanente y estable, como las casas construidas de concreto reforzado que creemos durarán por generaciones. Pero de hecho, no hay nada que sea sólido, no hay tal cosa; no se trata más que de una ciudad de sueños...

Tomemos un ejemplo del pasado reciente. Antes de la llegada de los comunistas chinos, ¿cuántos monasterios había en lo que se acostumbraba a llamar Tibet, el País de las Nieves? ¿Cuántos templos y monasterios existían entonces, como aquellos en Lhasa, Samye y Trandruk? ¿Cuántos objetos preciosos había... representaciones del cuerpo, el habla y la mente del Buddha? Ahora ni siquiera ha quedado una estatua. Todo lo que queda de Samye es algo parecido al tamaño de esta tienda, difícilmente más grande que una stupa. Todo fue saqueado, destruido o dispersado, y todas las grandes imágenes fueron destruidas. Estas cosas sucedieron y son una demostración de la impermanencia...

Si tenemos un entendimiento de la impermanencia, seremos capaces de practicar las enseñanzas sagradas. Pero si seguimos pensando que todo permanecerá tal cual como existe ahora, ¡entonces será tal como aquellas personas adineradas que siguen discutiendo sobre sus proyectos de negocio en sus lechos de muerte! Personas así nunca hablan sobre sus vidas futuras, ¿o acaso lo hacen? Son una muestra de lo que la apreciación de la certeza de la muerte nunca tocó sus corazones. Esa es su equivocación, su engaño.

La Mente.

... ¿Qué podemos decir sobre aquello que llamamos pensamientos? En este momento, mientras enseño el Dharma, permitámonos tomar en consideración la experiencia mental, o pensamiento que tienen de estar escuchándome atentamente a mi. ¿Acaso tiene alguna forma o color? ¿Lo podemos encontrar en la parte de arriba o de abajo del cuerpo, en los ojos o en las orejas? Lo que nosotros llamamos la mente no se encuentra realmente en ninguna parte. Si se trata en verdad de una cosa, debe tener características como el color. Debería ser blanca, amarilla, etc. O debería tener forma, como un pilar o un jarrón. Debería ser grande o pequeña, vieja o joven, etc. Puedes darte cuenta si la mente posee o no una existencia sólida con tan sólo dirigirte hacia tu interior y reflexionar cuidadosamente. Verás que tu mente no tiene comienzo, no tiene fin, ni permanece en ningún lugar; que no tiene color o forma y que no puede encontrarse dentro ni fuera de nuestro cuerpo. Y cuando veas que no existe como una "cosa", trata de permanecer en esa experiencia sin intentar etiquetarla o definirla.

Todo el sufrimiento proviene de no reconocer el aferramiento al ego como nuestro enemigo. Cuando somos golpeados por un palo o una piedra, duele; cuando alguien nos acusa de ladrones o mentirosos, nos enojamos. ¿Por qué sucede esto? Esto sucede porque sentimos una gran estima y apego por lo que pensamos sobre nosotros mismos, y por ello nos decimos: "Estoy siendo atacado". El aferramiento al "yo" es el obstáculo real para la obtención de la liberación y la iluminación... Es debido a esto que surgen los problemas. Es debido a la fijación a un "yo" que pensamos: "Soy tan infeliz, no puedo conseguir nada para comer, no tengo ropa, un montón de personas están en contra de mi y no tengo ningún amigo". Son pensamientos como éstos los que nos tienen ocupados todo el tiempo, y todo ello sin ser de ninguna utilidad. Esta es la razón por la que no estamos en el camino de la liberación y la Budeidad. Durante la completa sucesión de nuestras vidas, desde el tiempo sin comienzos hasta el presente, hemos estado renaciendo en uno u otro de los seis reinos. ¡Cuánto hemos estado penosamente en los tres mundos del samsara, como esclavos de nuestro aferramiento al ego!

El Morir.

Cuando el momento de tu muerte llegue, esto es lo debes hacer. Tal como lo hizo el Buddha cuando murió, apóyate sobre el costado derecho de tu cuerpo y deja que tu cabeza descanse sobre tu mano derecha. Inhala por el orificio izquierdo de tu nariz, bloqueando el orificio derecho con el dedo pequeño de tu mano derecha.

Medita en el amor, deseando la felicidad de todos los seres, numerosos así como vasto es el cielo, y genera compasión con el deseo de liberarlos de todo sufrimiento. Usando como apoyo tu respiración (inhalando y exhalando), imagina que exhalas toda tu felicidad, comodidad y bienestar, enviándolas a todos los que sufren. E inhala todas las enfermedades, la crueldad, las emociones negativas y los obscurecimientos de otros seres, tomándolos sobre ti. Después, reflexiona sobre el hecho de que el samsara y el nirvana son ellos mismo ilusorios, como un sueño o el acto de un mago. Todo está desprovisto de existencia inherente. Todo no es más que la percepción de la mente, y donde nada existe, no hay razón para tener miedo, aquí o en el bardo. Trata de mantenerte en esta convicción, sin ningún tipo de apego o aferramiento.

Bodhichitta.

Habituarnos a la Bodhichitta es como mantener un jardín bien cuidado, sin malezas, pestes y pedazos de madera tirados. Practiquémosla, reuniendo todas las cualidades de los vehículos mayores y menores, como si fuésemos contenedores que se llenan gradualmente con granos de cereal o gotas de agua. Sea que practiquemos Pratymoksha, el entrenamiento de los Bodhisattva, o los estados de generación y completación del Mantrayana, todo lo que hagamos debe servir de apoyo a nuestros votos de Bodhichitta. Incluso si practicamos el Mantrayana, debe sostener y confirmar nuestro compromiso como Bodhisattvas.

Debemos meditar constantemente en las dificultades de las que no podemos escapar. Hacia las personas, por ejemplo, que nos causan daño, que quieren competir con nosotros, que un momento son muy amigables pero repentinamente se vuelven contra nosotros sin ser provocadas, o hacia las personas que sin razón aparente (debido a nuestro karma) simplemente nos desagradan, no nos gustan, debemos intentar general la Bodhichitta aún más intensamente, especialmente cuando se trata de una circunstancia difícil. Tenemos que entender y tener respeto por nuestros mayores, nuestros padres y nuestros maestros. Como dijo Guru Padmasambhava: "No seas una preocupación o un lamento para tus mayores; atiéndelos con respeto". Si ayudamos a quienes se hayan en necesidad, estamos pisando el camino del los Bodhisattvas.

Haz lo que es importante.

El Dharma tiene dos aspectos: exposición y práctica. La exposición es únicamente el trabajo de la boca, y hay muchos que no practican las enseñanzas explicadas. Como dice el refrán: "Muchos han escuchado la Doctrina, pero aquellos que la aplican son pocos. Y aún, aquellos que la han practicado un poco muchas veces se apartan y se pierden". En lo que al Dharma respecta, la práctica es más importante que enseñar y hablar. El Dharma es algo que tenemos que hacer... Es preferible, además, seguir resueltamente y con determinación las instrucciones recibidas de nuestros maestros que practicar sobre la base de nuestro propio aprendizaje de libros y nuestra inteligencia... De todas nuestras actividades, la más importante es sentarse y practicar.

No debemos movernos demasiado, simplemente tenemos que mantenernos en nuestro asiento. ¡Sólo nos tropezaremos si nos levantamos! Debemos sentarnos apropiadamente, no demasiado tensos o rígidos, y recordar que los mejores practicantes desgastan sus cojines de meditación y no las suelas de sus zapatos.

Nota: Traducido al castellano por Yeshe Jungne del sitio http://www.shechen.org/teach_enlightcour_dkr.html, para beneficio de todos los seres, para que logren la felicidad y sus causas y se liberen del sufrimiento. Om mani padme hung
Extractos del libro "Enlightened Courage" Snow Lion