viernes, 1 de abril de 2016

Bajo una sola sombrilla

Una pareja monástica socava las perspectivas sectarias tradicionales.

Rita Gross


Buddhism: One Teacher, Many Traditions
By The Dalai Lama and Thubten Chodron
Wisdom Publications, 2014
352 pp.; $29.95 (Cloth) 

El título de este libro transmite su punto central que, a pesar de la enorme diversidad interna, todas las tradiciones budistas derivan de un maestro, el Buddha. Ya que todas ellas veneran al mismo maestro, estas diversas formas del budismo podrían respetarse y aprender entre sí.
Sin embargo, los budistas a menudo discuten bruscamente sobre aquellos textos y enseñanzas que representan las "reales" enseñanzas del Buddha. Estos desacuerdos se intensifican porque los textos budistas son conservados más bien en tres cánones diferentes en tres lenguas: Pali, chino y tibetano. Las diferentes escuelas de budismo han estado ampliamente separadas geográficamente por lo que tenían poco contacto entre sí hasta hace poco. Aunque algunos budistas occidentales estudian voluntariamente con maestros de varias escuelas budistas, tal práctica no es habitual entre los budistas asiáticos o, incluso, entre muchos budistas occidentales. Algunos maestros budistas que trabajan en occidente desalientan activamente a sus estudiantes de estudiar con otros maestros. Así, a pesar del énfasis del budismo en la compasión y la correcta palabra, los budistas disfrutan mucho del sectarismo atravesado por líneas confesionales.
Todas las formas actuales del budismo derivan de dos conjuntos diferentes de literatura del sur de Asia, escritos en pali o en sánscrito, pero hay poca coincidencia entre estos dos conjuntos de textos. Alguna vez circularon versiones en sánscrito de algunos textos del pali, pero se han perdido. El canon chino incluye traducciones de muchos textos en sánscrito y pali, pero las traducciones chinas de los textos de pali a menudo contienen material no encontrado en la versión pali. Los budistas Theravada aceptan únicamente como la "palabra del Buddha" a la literatura pali y consideran a la literatura sánscrita sobreviviente como innovaciones posteriores poco fiables. Por el contrario, el canon tibetano consiste principalmente de textos Mahayana, traducidos del sánscrito, los mismos textos que los budistas de Theravada consideran como no auténticos. Cuando los budistas tibetanos y theravada hablan de "lo que el Buddha enseñó," se refieren a conjuntos de textos totalmente diferentes.
El potencial de mutuo desprecio entre tibetanos y el budismo Theravada, por eso, es muy alto. Cuando recordamos que el así llamado hinayana o «vehículo menor», del sistema tibetano de tres-yana (Hinayana, Mahayana, Vajrayana) contiene enseñanzas características encontradas en la literatura pali, este potencial se intensifica. Los eruditos y maestros tibetanos generalmente no están bien familiarizados con la literatura budista pali y miran como superiores sus enseñanzas Mahayana y Vajrayana. Devolviendo el cumplido, algunos theravadines no consideran nada del Mahayana como siendo realmente parte del budismo. Por ejemplo, algunos Theravadines rechazan restaurar la ordenación monástica para mujeres, porque esta práctica ha sobrevivido sólo entre los budistas del Mahayana chino. Esta división es común incluso entre los eruditos occidentales. Algunos estudiosos occidentales del budismo están tan familiarizados con la literatura pali y el budismo Theravada como lo están con el budismo Mahayana, sea tibetano o chino, así como con la literatura en sánscrito y viceversa. Muchos maestros occidentales no están muy preparados en la historia del budismo y en la literatura de las formas de budismo distintas al linaje en que enseñan.

¡Qué refrescante, en medio de este sectarismo, para el Dalai Lama, el más conocido representante del budismo tibetano, como para su coautora, la monja americana Thubten Chodron, publicar un libro proclamando que las tradiciones pali y sánscrito son más similares que diferentes y reconociendo las deudas de la más joven tradición sánscrita a la más vieja tradición Pali! Ellos promueven el respeto mutuo como el estudio entre las dos tradiciones. No se utilizan, incluso ni una vez, en este libro los términos familiares Hinayana, Mahayana y Theravada, animándonos a dar una nueva mirada en las convenciones familiares budistas, sin importar la forma del budismo a la que nos podamos adherir. Ni tampoco estos autores clasifican jerárquicamente las dos tradiciones, a pesar del hecho de que cada una tiene una historia de denigración de la otra.

A lo largo del libro, los autores sugieren que diferentes lenguas y la distancia geográfica impidieron anteriormente que budistas de diferentes orientaciones tuvieran información precisa acerca de cada una. Por lo que los chismes y estereotipos florecieron en dicho contexto. Algunos afirman que muchos monjes tántricos beben alcohol y se comprometen en relaciones sexuales, mientras que otros afirman que los miembros de las antiguas escuelas budistas no dan importancia a la compasión ni comprenden la vacuidad. Los autores piden repetidamente a todos los budistas renunciar a tales estereotipos mutuos y en cambio dialogar, estudiar las escrituras de los otros y aprender de las prácticas de los demás; consejo familiar en el ámbito del intercambio interreligioso, pero por desgracia poco frecuente en los círculos budistas.
Uno en One Teacher, Many Traditions [Un maestro, muchas tradiciones] puede aprender mucho tanto sobre la tradición pali como sobre la tradición sánscrita, que cubre todos los temas encontrados en cualquier estudio estándar, más académico del budismo. Es muy alto el nivel de información erudita de este libro, y la información proporcionada sobre las tradiciones pali y sánscrita es exacta y completa. El Dalai Lama está, por supuesto, muy familiarizado con la tradición sánscrita. Pero ni su formación ni la formación inicial de Thubten Chodron habrían implicado el estudio significativo de la tradición pali. Los Sutta [sutras] Pali, tomados por muchos como el ser nuestra aproximación más cercana a las enseñanzas reales del Buddha histórico, es en gran parte desconocido para los budistas tibetanos. Sin duda, los comentarios de eruditos pali, citados con frecuencia en este libro no forman parte de la capacitación recibida por los educados en la tradición sánscrita. Por eso, estos autores presentan un modelo admirable para otros budistas.

Ellos superan convenciones previamente aprendidas en su propia tradición y estudian profundamente una tradición diferente. Pero lo más importante, la estudian en sus propios textos, en lugar de depender de comentarios polémicos acerca de esa tradición en los textos de su propia tradición. Todos debemos estar dispuestos a suspender el escepticismo acerca de las formas desconocidas de budismo y explorar profundamente sus textos y prácticas, sin presuposiciones. Si hacemos esta ardua labor, encontraremos que estos budismos desconocidos tienen sentido en sus propios términos y merecen nuestro respeto. Si resultan ser muy similares o muy diferentes de nuestro propio budismo eso es irrelevante. Si investigamos estas múltiples versiones del budismo, entenderemos cómo todos ellos derivan de las enseñanzas de un maestro que todos veneramos. Entre las muchas virtudes de este libro es significativo el uso que hacen sus autores de "ella" en lugar de "él" como pronombre genérico. Dado que muchos budistas no son sensibles a la necesidad del lenguaje de inclusión de género, de género neutral, tal uso por parte de un importante líder resulta significativo. De acuerdo, tampoco 'ella' no es neutral, pero su sensibilización y potencial correctivo en contextos de dominación masculina es enorme. Se espera que otros maestros y autores budistas tomarán nota y seguirán su ejemplo.
Mis elogios para el libro, sin embargo, no van sin reservas. El marco general del libro es la afirmación de que el Buddha enseñó los tres vehículos: el vehículo del Oyente (Sravakayana), el vehículo de Realizador solitario (Pratyekabuddhayana) y el vehículo del Bodhisattva (Bodhisattvayana). (Estos tres vehículos no son los mismos que los más familiares para los estudiantes de budismo tibetano — Hinayana, Mahayana y Vajrayana — y a lo largo de este libro, cuando hablan de los "tres yanas", para los autores siempre significan el antiguo sistema de los vehículos del Oyente, del Realizador solitario y del Bodhisattva, no el muy posterior sistema específico del budismo tibetano.) Unas frases más adelante, leemos que los que se forman en la tradición pali practican ante todo el vehículo del Oyente, mientras los que se forman en la tradición sánscrita practican principalmente el vehículo del Bodhisattva.

Dos preguntas fundamentales surgen de estas afirmaciones. ¿Esta es la retórica antigua "Hinayana / Mahayana" reapareciendo bajo diferentes nombres? Los autores dejan claro que los lectores no deben sacar esa conclusión, pero teniendo en cuenta la tendencia entre los maestros contemporáneos en la tradición tibetana de denigrar y descartar los textos y la tradición pali, debe tenerse gran cuidado de no caer en esta vieja costumbre. Los maestros tibetanos se refieren con frecuencia a estos anteriores tres yanas (Oyente, Realizador solitario y Bodhisattva), generalmente clasificándolos jerárquicamente. El vehículo del Oyente se aprecia como que tiene una "visión inferior" respecto a la del vehículo del Bodhisattva, algo que puedo dar fe por escuchar las enseñanzas orales de los maestros tibetanos. ¿Enseñó el mismo Buddha histórico estos tres vehículos? Textos de varias épocas históricas son atribuidos al "Buddha", lo que significa que uno no puede afirmar que algo fue enseñado por el Buddha en sentido literal. La mayoría de los estudiosos de la historia budista concluyen que el sistema de Oyente, Realizador solitario y Bodhisattva, es posterior por siglos al Buda histórico. Este es mucho más frecuente en la más joven tradición sánscrita que en la más antigua tradición pali, aunque también se encuentra en los textos pali. Aunque los autores carezcan de dudas al afirmar que las tradiciones pali y sánscrito tienen mucho en común, aun así este sistema antiguo de tres-yana no resultaría la mejor opción para el marco general organizativo del libro.

La gran fortaleza de One Teacher, Many Traditions  [Un maestro, muchas tradiciones] es la presentación empática e imparcial de ambas tradiciones por parte de los autores. Afirman que los vehículos del Oyente, del Realizador solitario y del Bodhisattva son enseñados en las tradiciones pali y sánscrito, una afirmación exacta. También señalan que el vehículo del Bodhisattva no se limita a la tradición sánscrita sino que también se practica en la tradición pali, tanto históricamente como en la época contemporánea. Esta realidad, desconocida para la mayoría de mahayanistas, debilita las reclamaciones Mahayana sobre su superioridad. En particular, estos autores rompen con la habitual evaluación tibetana de estos tres yanas al no clasificarlos jerárquicamente. Uno puede esperar que los ejemplos establecidos por estos autores se conviertan en modelo de los maestros budistas cuando hablen de la gran diversidad dentro del budismo.

Rita Gross es una erudita y practicante budista, profesora retirada de estudios comparativos en religión. También es una maestra de dharma de alto nivel en el Mindrolling Lotus Garden y autora de
Buddhism After Patriarchy [Budismo después del patriarcado].



No hay comentarios:

Publicar un comentario